Una descarga de energía lo mató - El Diario Del Otùn - Enero 3 2015

Mientras se encontraba realizando un arreglo eléctrico, un hombre falleció en Dosquebradas el día de ayer.


Los hechos se desarrollaron en el barrio Altos de la Capilla, ubicado en la vereda Sabanitas Baja del Municipio Industrial en cercanías a la hacienda San Rafael, cuando eran las 11:35 de la mañana. Al parecer, José Helmer García Suárez de 56 años, como fue identificado el hoy occiso, estaba realizando un arreglo eléctrico, presuntamente había una cuerda suelta e intentó subirla, y recibió una fuerte descarga que le quitó la vida de inmediato.


Según allegados al hombre, la víctima quien se encontraba en el sector desde hace un mes y vivía con una hija, al parecer cuidaba un terreno de un familiar en esa localidad, y estaba buscando cómo arreglar el fluido eléctrico, por lo que muy temprano se fue con una escalera para buscar cómo solucionar el inconveniente e iniciar los trabajos ya que hace poco había limpiado el lote donde al parecer construirían, sin embargo, cuando la hija fue a llevarle algo de tomar, lo encontró en el piso.


Cuentan los curiosos que llegaron al lugar, que al momento del incidente se escuchó un fuerte grito y una pequeña explosión.


En el sitio se evidenció que el cuerpo del hombre quedó bañado en sangre. Según fuentes extraoficiales, el hoy occiso tenía platinas en el cuerpo, lo que hizo que la descarga fuera más fuerte. Al momento de la inspección al sitio, se conoció que la víctima llevaba un machete y la cuerda en cuestión quedó al lado del cuerpo.
 


Falleció


Según sus familiares era un hombre trabajador, amable y alegre. Pasó con sus cercanos el 31 de diciembre, juntos recibieron el año sin pensar que horas después este trágico accidente sucedería.


Laboraba como negociante y actualmente vivía en la calle 65 con carrera 18 del barrio La Capilla del municipio mencionado.


¿Quién era?
 

Según sus cercanos, José Helmer era desplazado por la violencia de Salamina (Caldas) y se encontraba a la espera de una ayuda del Gobierno para poder construir una casa, con la que había soñado por mucho tiempo.

Se pudo establecer que estuvo preso por 18 años, al momento del levantamiento, el cadáver no tenía documentos personales.


El hoy occiso tenía 2 hijos y se conoció que hace un tiempo también vivió en el barrio Kennedy de Pereira al lado de la madre y un hermano.