Álvaro Ramírez González
La laguna del Otún es sin duda alguna uno de los lugares más bellos de la geografía pereirana. No está más lejos que 35 kilómetros de Santa Rosa de Cabal; siempre estuvo allí tan cerca pero tan lejos por que era un lugar inaccesible y solo al alcance de unos pocos montañistas con la fortaleza, el equipamiento y la pericia para llegar. Era patrimonio de todos para el disfrute de muy pocos.
El acceso a la laguna y al Parque Natural de los Nevados ha estado restringido no tanto por limitaciones ó talanqueras de tipo ambiental, como por la desidia y el abandono de los gobernantes. No hay otra explicación.
Por mis curiosidades ganaderas recibí y acepté gustoso una invitación del gobernador Víctor Manuel a conocer e inaugurar una carretera de Santa Rosa de Cabal a El Porvenir, un lugar a más de 3.000 mts de altura, trayecto este que lo hicimos en menos de una hora. De El Porvenir a la laguna quedan faltando como 10 kilómetros que son ya muy fáciles de terminar.
Tres años de trabajo continuo en una geografía escarpada, húmeda, lluviosa y muy difícil. Tres puentes nuevos sobre unas quebradas profundas y muy caudalosas permitieron el empalme y la terminación de este primer trayecto.
Recorrí una buena parte de la zona y llegué hasta los 4.000 mts de altura en una preciosa finca llamada Potosí, unas extensas planadas llenas de pasto al pie de los nevados dedicadas a la ceba de ganado normando.
Era inocultable la alegría y la gratitud de los finqueros que fueron a saludar al gobernador Tamayo. Se producen allí 25.000 litros diarios de leche y algunas pocas toneladas de papa, y justamente por que no había como sacarlas a Pereira y sí a Manizales vía Villamaría por una vía larga, muy mala y muy tortuosa. Ahora con esta nueva y rápida vía seguramente aumentará la producción agrícola y pecuaria y se disparará el turismo y con todo esto el progreso de la región, la valorización de las tierras y la seguridad de la zona. Todo eso lo hace una carretera. Quien lo creyera.
Debo desde esta columna felicitar al gobernador Víctor Manuel Tamayo por esta maravillosa obra, donde no hay votos, ni mucha gente pero en cambio unas condiciones geográficas muy adversas.
Acerca esta carretera la laguna del Otún a todos los pereiranos y redime una región grande, y con un gran potencial agrícola, pecuario y turístico. En horabuena Víctor!!
SOBREMESA: Leí en el periódico de la U, el discurso de mi viejo amigo Eduardo Castrillón. Me califica de politiquero y desinformador. Hombre Eduardo, no milito ni estoy en ninguna campaña. No confundas opinar con militar. El Presidente Uribe tiene desde enero un grueso y ordenado paquete de documentos que soportan todo el daño que han sufrido las instituciones de Pereira en el gobierno de Israel, que usted ciego defiende. Uribe está preocupado, documentado y molesto. Tiene muy claro que va a perder Vásquez con Arango. Esto no es echando discursos Eduardo. Es documentando, probando y en cien días votando. Allí nos vemos.
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